Recetas
2 pechugas de pollo de 180 g sin piel
1 diente de ajo
Orégano y albahaca (secos) (C/N)
50 cc de aceite de oliva
100 g de queso rallado parmesano
20 aceitunas negras descarozadas
2 huevos
Ajo y perejil (frescos) o provenzal (seco) C/N
Pan rallado y harina C/N
Sal y pimienta C/N
2 cdas soperas de mostaza
Para el puré de zanahorias:
2 zanahorias grandes (aproximadamente 450 g)
1 cda chica de finas hierbas (secas)
1 cda sopera de manteca
2 cdas de aceite de oliva
Pimienta C/N
Albóndigas: Hervir el pollo en agua o caldo. Procesar el pollo junto con el diente de ajo, las aceitunas y el aceite de oliva.
Retirar de la procesadora y agregar el queso rallado, el orégano, la albahaca y la mostaza. Rectificar.
Aparte, batir ligeramente los huevos junto con la provenzal.
Armar las albóndigas y pasarlas, primero por harina, luego por los huevos, y por último por el pan rallado.
Llevarlas al horno, en placa previamente con un poco de aceite.
Hornear a 180ºC por 25 minutos o hasta cuando comiencen a dorarse.
Puré de zanahorias: Pelar, lavar y cortar las zanahorias en cubos irregulares. Hervir por 25 minutos o hasta que estén bien tiernas. Pisarlas con el tenedor en la misma cacerola donde las cocinó.
Aun cuando esté caliente, agregue las finas hierbas junto con la manteca pomada (sacarla unos minutos antes de la heladera o ponerla al microondas por 10 a 15 segundos) y una pizca de sal y pimienta.
Antes de servir, rociar con aceite de oliva.
Emplatado: Servir 3 a 4 albóndigas con dos cucharadas de puré de zanahorias por persona.